Invertirán $256.232 millones para el desarrollo regional sostenible del Macizo Colombiano
Invertirán $256.232 millones para el desarrollo regional sostenible del Macizo Colombiano
Así se establece en el documento CONPES que al parecer será firmado a comienzos del 2018. La ejecución del mismo iría hasta el 2030. Es importante aclarar, que aunque el proyecto ya está listo, puede presentar algunas modificaciones adicionales.
Debido a las problemáticas que ponen en riesgo la sostenibilidad del Macizo Colombiano, las cuales están asociadas, principalmente, al deterioro del capital natural y el aumento de la vulnerabilidad ante riesgos de desastres naturales y el cambio climático; el desarrollo productivo poco diversificado que genera conflictos de uso de suelo; y la debilidad institucional para generar gobernanza en el territorio, el Gobierno estableció Implementar un modelo de desarrollo regional integral que impulse el desarrollo productivo sostenible y la conservación de los ecosistemas.
CONPES
El costo total estimado para el financiamiento de las iniciativas de política propuestas en el documento CONPES es de aproximadamente $256.232 millones al año 2030. De esta suma la Nación participa con un 27% ($68.794 millones), y las entidades territoriales y autoridades ambientales de la Estrella Fluvial con un 73% ($187.438 millones).
No obstante, es posible tener un aumento progresivo de los recursos en la medida en que se ejecuten las acciones contempladas en el proyecto.
Estos recursos provienen de distintas fuentes de inversión que incluyen, entre otras, el Presupuesto General de la Nación – PGN, los recursos propios de las entidades territoriales y recursos aportados por cooperantes. Estos últimos no incluyen recursos nuevos que podrían gestionarse como resultado de los Acuerdos de paz con las FARC y con la cooperación internacional.
Estrategias para un mejor futuro
En ese sentido, fueron establecidas tres estrategias desarrolladas a través de líneas de acción, que implican la realización de actividades por parte de las entidades y autoridades ambientales del nivel nacional y departamental.
La primera estrategia plantea acciones para la protección, recuperación de los ecosistemas y la biodiversidad, así como para el control y vigilancia ambiental para el acceso a recursos naturales. La segunda, el desarrollo productivo sostenible a partir de la diversificación de las actividades productivas y la resolución de conflictos en el uso del suelo. Y la tercera, busca fortalecer la gobernanza mediante la definición de una visión compartida del territorio que facilite la articulación de esfuerzos y recursos.
Acciones que se implementarían
El CONPES pretende consolidar un mosaico de conservación que permita reducir la pérdida de biodiversidad, mantener la provisión hídrica y proteger y recuperar los suelos. Lo anterior está encaminado a constituir un modelo de gestión territorial que impulse la formulación e implementación de proyectos de conservación que aborden las áreas protegidas del Sistema Nacional de Áreas Protegidas y los ecosistemas estratégicos y áreas adyacentes.
Para lograr lo anterior, se impulsará la creación de nuevas iniciativas de conservación a nivel local y regional con la declaratoria de áreas protegidas y el registro de ecosistemas estratégicos.
Se tiene presupuestado que las Corporaciones Autónomas Regionales del Macizo al año 2025 invertirán alrededor de $2.500 millones en la actualización, formulación e implementación de planes de manejo, entre los que se encuentran los relacionados con las áreas protegidas regionales, reservas forestales protectoras y otras áreas del orden regional en los departamentos de Nariño, Valle del Cauca y Huila.
En la lucha contra la deforestación
El proyecto también propende por impulsar estrategias que reduzcan la deforestación y conduzcan a la recuperación de la funcionalidad de los ecosistemas que se encuentran tanto en el interior como al exterior de las áreas protegidas.
En este sentido, según el documento, se avanzará en la estructuración e implementación de proyectos de Pagos por Servicios Ambientales – PSA, restauración ecológica, aprovechamiento de la biodiversidad, negocios verdes y de mitigación y adaptación al cambio climático.
Expone, que las autoridades ambientales deberán ejecutar sus programas para el control y tráfico ilegal de madera, en el cual las entidades territoriales y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible brinden apoyo para el monitoreo, prevención y vigilancia.
Una de las actividades posteriores al decomiso de fauna silvestre es la rehabilitación especializada de los especímenes, de manera que se pretende garantizar que sean reintroducidos a su hábitat de forma exitosa.
Asimismo, teniendo en cuenta las diferentes problemáticas asociadas con la extracción de recursos naturales, la incidencia de cultivos ilícitos y el tráfico ilegal de especies de flora, el Ministerio de Minas y Energía y la Agencia Nacional de Minería – ANM coordinarán la realización de capacitaciones para la prevención de la explotación ilícita de minerales y brindará asistencia técnica a unidades de producción minera bajo el amparo de un título minero para su formalización.
Además, se realizarán capacitaciones a mineros en la utilización de tecnologías limpias y visitas de seguimiento y control a títulos mineros de oro con planta de beneficio.
Producción sostenible
Otro objetivo que expone el CONPES, es minimizar el impacto negativo de los sistemas productivos sobre los ecosistemas y sus servicios. Esto considerando el potencial de la ecorregión en términos de producción de alimentos, prestación de servicios turísticos y aprovechamiento forestal, entre otros.
En este sentido, se establece hacer uso eficiente de los recursos naturales para que estos tengan mayor resiliencia ante un clima cambiante, y así disminuir los impactos negativos de las actividades agropecuarias sobre el entorno.
Por tanto, se destinarán incentivos para la promoción de plantaciones forestales con fines comerciales, focalizadas en zonas de desarrollo estratégico que cuenten con encadenamientos para la producción, la logística y la comercialización. Además, se impulsarán sistemas agroforestales con frutales, caucho y cacao, así como ganadería sostenible en aquellas áreas con aptitud para estos sistemas productivos a través de incentivos, subsidios o créditos.
Una zona potencialmente turística
Con el objetivo de aprovechar el capital natural de la ecorregión, se impulsará el posicionamiento del turismo como alternativa productiva sostenible, especialmente el ecoturismo y etnoturismo.
Esto incluye el diseño de rutas de avistamiento de aves, que complementen las que actualmente funcionan en la zona de los Andes orientales de los departamentos de Tolima y Huila. Un elemento adicional a tener en cuenta será el fortalecimiento del sistema de información turística del Macizo sobre sus atractivos y prestadores de servicios a través de la actualización de aplicaciones web.
Por otra parte, teniendo en cuenta que la viabilidad de la actividad turística depende de las capacidades existentes en la región, por lo que es necesario formar tecnólogos en ‘guianza’, se pretende formar a excombatientes del conflicto armado para la prestación de estos servicios en empresas del sector.
De igual forma, se promoverán negocios verdes que permitan el desarrollo de actividades productivas alternativas para los productores que se encuentran en zonas con restricciones en el uso del suelo.
Es importante aclarar, que aunque el proyecto ya está listo, puede presentar algunas modificaciones adicionales hasta el día en que finalmente sea firmado por los diferentes gobernantes y entes territoriales que cobija.
Zona agobiada por el conflicto interno
La ecorregión del Macizo Colombiano ha sido un territorio en el que el conflicto armado ha tenido importantes efectos en términos sociales, económicos y ambientales. Su incidencia ha generado cerca de 636.857 víctimas, en su mayoría desplazados internos, y ha afectado cerca de 6.200 hectáreas por el establecimiento de cultivos de uso ilícito. En este sentido, de acuerdo con el Índice de Incidencia del Conflicto Armado20 del DNP (2016), 16 municipios de esta área están catalogados como de alta y muy alta incidencia del conflicto armado.
‘Útero de la madre tierra’
Esta ecorregión se encuentra localizada sobre la cordillera de los Andes en el suroccidente del país y cubre una extensión de 4.8 millones de hectáreas, que representan el 4,3% del área continental de Colombia. Abarca 89 municipios de siete departamentos, con base en consideraciones de tipo geológico, ambiental, social, histórico y político administrativo.
El Macizo se destaca principalmente por tres atributos: Primero, en esta región se originan las cordilleras Central y Oriental; segundo, allí confluyen los ecosistemas andino, amazónico y pacífico; y tercero, es el lugar donde nacen las cinco arterias fluviales más importantes del país: los ríos Magdalena, Cauca, Putumayo, Caquetá y Patía. Por esta razón, se le ha denominado como la Estrella Fluvial Colombiana.